viernes, julio 15, 2005

Primaveras guardadas

Los enchufes estaban desenchufados. Las llaves desencajadas. El viento deambulaba: desordenado, y las letras sinfines –hambrientas –transcurrían a través del tiempo.
Las rosas tenían perfume: si. Perfume de mundos deshabitados. Deshabitados porque los minutos pasaban... y no perdonaban.
La aurora irradiaba melancolías; melancolías que un día fueron.
Los satélites naranjas iban de acá para allá sin rumbo alguno, esperando que los jazmines encierren, algún día, aquellos recuerdos mareados, confundidos.
Todo tenía sentido. Sentido de aromas cansados: cansados de caminar bajo la lluvia. Lluvia de arroyos, lluvia salada.
La sal, endulzaba la vida con un ácido sabor a rutina, y el amargor que causaba, se sentía. Se sentía por el viento, que corría sobre las velas encendidas por el sol: sol de primavera.
Primavera y primaveras: guardadas en un caja violeta. Violeta por las nubes: por el alba. Primaveras que alumbraban y ensombrecían: iluminaban a aquellos sueños, aquellas ensoñaciones.
Ensoñaciones rotas por la ignorancia, partidas a cuchillo. La ignorancia venía: –de donde- venía.
Cantarinas y revoltosas anunciaban, las catapultas, que el fin estaba asomándose, y el techo cayéndosele a pedazos sobre la espalda, acompañaba con añejas melodías, canciones que mentían con astucia poesías de autores anónimos.
-Y si amigos, es el fin- dijeron.


J.S (alias P.L)

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Heme aquí: no se bien quién soy ni cuantas personalidades tengo. No estoy segura de si existo o si existe aquella persona que lea esto.
Lamento no haberme presentado antes. En este mundo –en este momento- soy Penny Lane: a vuestro servicio (bah...según).
(El “P.L” puede variar y adaptar forma de...otros. Todo depende de cómo giren las estrellas)

Hasta la próxima,
Yo, Tú, Él, P.L, J.S...y demás.

Locura de nuestra mente, hecha palabra dijo...

mi querida julieta,espectacular lo suyo,es bueno descubrir nuevas promesas en escritores,pero usted a diferencia de los politicos cumple con las expectativas.como usted dice coman sandias y sean felices,aunque usted odie las sandias,eso lo debemos entender como que hay que hacer cosas que no nos gustan para ser feliz?,no se si sera aeronautica cuando sea grande pero usted,niña,ya es grande,espero que mucha gente pueda leer sus escritos y hacerse conocida,y si su hermano tam quiere escribir bienvenido.
si puediese elegir creo que me gustaria que les hagas leer campos infinitesimales y de tu hermano,Nadia,bah,es lo unico que me pasaste de el,pero campos es grandioso.

diego
pd:la vida es bella
pdpd:sino lo es,es cuestion de ustedes hacerla
pdpdpd:si no tienen imaginacion para hacerla bella,podemos orientarlos en sencillos pasos utilisma

ahora si,nos despedimos muy atentamente

Anónimo dijo...

S.../...D
Sr. Kleidermacher: agradezco muy encarecidamente vuestra crítica a mi...como se llame. Es alentador que alguien te aliente!
En verdad...(lamento desilusionarlo, Sr.) pero lo de las sandías es tal y como vino...ninguna filosofía detrás. Simplemente las sandías me inspiran felicidad (así como las letras "M" ternura). Quizá por su fresco color, probablemente porque me recuerde al verano, y el verano en este momento -en el cual se me están congelando muy formalmente mis dedos- me de felicidad.
No! Ya se... en verdad creo que lo de las sandías proviene de una vez (hace varios años) que yo quería comprarme un vestido blanco que tenía dibujos de frutas (entre ellos, la sandía), fue un amor a primera vista: lo amé desde el principio...pero fue un amor fallido ya que cuando volví a comprarlo el negocio estaba cerrado y yo vivía a varios cientos de kilómetros como para volver en otra ocasión.
Creo que las sandías despiertan mi amor por aquel vestido que hizo de mi una mejor persona.
(Espero haber contestado satisfactoriamente vuestra pregunta, Sr.)

Respecto a mi hermano, Santiago, dudo que quiera involucrarse a esta pagina...está absolutamene exluido del mundo virtual.
Y lo de Campos Infinitesimales...si, será un placer. Igual antes de "publicarlo" quisera hacerte una pregunta.

Hasta la próxima,
Juli.

PD (la original): acaso es Caperucita la malévola que ha cambiado nuestros horarios, Sr. Kleidermacher?
PD2 (Un poco más mediocre):la vida es bella! Concuerdo con usted... creo que es cuestión de propia voluntad. Pero ojo! Ser feliz y vivir la vida con felicidad no implica cerrar los ojos hacia el mundo exterior!